El mejor estudio de mercado es escuchar las necesidades e ideas de los clientes. Por eso, cuando los clubes náuticos preguntaron repetidamente a la empresa alemana MY-Electroboat si ofrecían embarcaciones neumáticas rígidas (RIB) con sistemas de propulsión eléctrica, se pusieron en modo de investigación y desarrollo. MY-Electroboat es un fabricante de embarcaciones totalmente eléctricas situado en el lago Ammer (Baviera), a pocos kilómetros de la sede de Torqeedo. \”Enseguida vimos el potencial de una embarcación muy eficiente y divertida\”, dice Sebastian Sieber, experto técnico de MY-Electroboat. \”Y sabíamos que nuestros socios de Torqeedo estarían a la altura\”.
Un par de meses más tarde, el MY-RIB 420 de 4,2 metros de eslora con un motor eléctrico Torqeedo de 12 kW está en el mercado como la última lancha semirrígida totalmente eléctrica. La semirrígida es una embarcación perfecta para la movilidad eléctrica en el agua gracias a su versatilidad y a sus propiedades de rendimiento únicas. La semirrígida Zero-E del astillero Tornado, de 6 metros de eslora, se ha utilizado como barco de comité en el Monaco Solar Challenge, en la Costa Azul. Pero las semirrígidas pueden hacer mucho más que transportar pasajeros; pueden trabajar duro, ayudar y ser muy divertidas.
- EL PODER DEL SILENCIO
A principios de la década de 1990, las semirrígidas se hicieron populares para entrenar la vela porque sus tubos inflables actúan como defensas gigantes, permitiendo a los entrenadores acercarse a los veleros durante las sesiones de práctica. Los motores eléctricos son un complemento ideal para los clubes de vela, tal y como lo ve el director general de Tornado, Lars Hjorth: \”La vela es un deporte limpio que funciona con el viento y tiene un impacto mínimo en el medio ambiente. La propulsión eléctrica permite a los entrenadores y jurados ser tan ecológicos y respetuosos con el medio ambiente como los deportistas\”. Es una ganancia sin pérdida. La semirrígida Zero-E está propulsada por el fueraborda Deep Blue 50 R de Torqeedo y una batería Deep Blue de 40 kWh, y \”tiene un rendimiento que es, en muchos aspectos, muy parecido al de un motor fueraborda de gasolina de 70 CV\”, afirma Lars.
Sebastian Sieber, de MY-Electroboat, ve otra ventaja de los sistemas de propulsión eléctrica para las embarcaciones de recreo: \”Sin el ruido chirriante de los fuerabordas diésel, los autocares y los jurados pueden hablar realmente entre ellos y con los navegantes\”. No sólo es bueno para el medio ambiente, sino también para comunicarse con la gente. Por eso no es de extrañar que clubes náuticos de toda Alemania hayan encargado el MY-RIB 420. World Sailing, el organismo que gobierna este deporte, calcula que el cambio de los barcos de autocares a motores eléctricos puede reducir las emisiones en un 30%.
- SÓLO VOLAR SOBRE EL AGUA
\”La clave de la propulsión eléctrica es la gestión del peso\”, dice Sebastian Sieber. No es de extrañar que las semirrígidas funcionen bien con motores eléctricos: ¡están hechas en parte de aire! Al ser tan ligeras, las semirrígidas eléctricas son superiores a su categoría. El casco del MY-RIB 420 está fabricado con materiales compuestos de alta tecnología y se ha diseñado específicamente para un sistema de propulsión eléctrica. Mientras que las embarcaciones semirrígidas suelen ser muy pesadas para la espalda cuando están propulsadas por motores de combustible fósil, como señala Sieber, la batería Torqeedo Power 48-5000 y el cargador están integrados debajo del volante y del asiento del piloto, justo en el centro de la embarcación. Esto mejora la maniobrabilidad y el equilibrio. La directora de ventas de MY-Electroboat, Stephanie Strumberger, añade: \”Tiene una sensación muy parecida a la de una moto de agua. Es muy divertido\”.
Las semirrígidas también se utilizan a menudo como embarcaciones auxiliares para veleros y yates a motor, y muchos patrones profesionales están cambiando a las semirrígidas eléctricas. Los motores eléctricos requieren muy poco mantenimiento, se ponen en marcha con sólo pulsar un botón, tienen mucho par motor para mover cargas pesadas y son ultrasilenciosos.
Con la extrema aceleración típica de los motores eléctricos, las semirrígidas pueden funcionar incluso en condiciones exigentes, con olas altas y fuertes corrientes. Un ejemplo es la semirrígida Naviwatt ZenPro 580, que se utiliza en los puertos franceses como embarcación de trabajo. \”Las condiciones de trabajo de la ZenPro 580 son inalcanzables para las embarcaciones con motor de gasolina\”, afirma Jean-Charles Santoni, del astillero de La Ciotat. \”Es un auténtico placer no escuchar el ruido de un motor de combustión interna todo el tiempo\”. El motor eléctrico del Deep Blue 50 R tiene un par motor excepcionalmente alto, lo que facilita el trabajo de Santoni: \”Esto nos permite ayudar a los superyates a maniobrar\”.
- LAS COSTILLAS LE LLEVARÁN A LUGARES
Si ajustas el motor Torqeedo Cruise del MY-RIB 420, puedes conducir la embarcación en aguas de tan sólo 30 cm de profundidad. \”Y como es tan ligero, no dañará el casco si llegas a la playa\”, dice Stephanie Strumberger.
El legendario fabricante de semirrígidas Zodiac, que presentó su serie eOpen totalmente eléctrica con Torqeedo el año pasado, sabe que las semirrígidas eléctricas \”son ideales para explorar lugares inaccesibles\”. La serie eOpen se concibe como la \”propia isla privada\” del cliente.
Los constructores de barcos también ven las semirrígidas \”como la bicicleta de la movilidad urbana en el agua\”, dice Strumberger. \”No hay más que ver Copenhague y Ámsterdam. Todas las casas flotantes tienen semirrígidas como embarcaciones domésticas\”. El futuro está muy abierto. Y una cosa es segura: las semirrígidas eléctricas estarán en todas partes.